Hace tiempo que escuché que un buen perfume es áquel que anuncia la llegada de alguien, se hace invisible cuando estás a su lado, y te queda su recuerdo cuando se ha ido.
Aunque de una manera inconsciente (o no tanto para algun@s) el olor es una tarjeta de presentación, todos recordamos cómo huele una persona, aunque no la tengamos delante, la memoria olfativa es mucho más duradera que cualquier otra. Y se recuerda durante toda la vida.
La propuesta de hoy se encamina en este sentido, puesto que un buen aroma es una tarjeta de presentación, puesto que despierta en nosotros sensaciones, y reacciones diferentes en función de lo que olamos, qué mejor manera que dar un toque de distinción, y hacer de nuestros espacios, empresas, hogares, un lugar mucho más agradable e inolvidable.
Para ello contamos con una empresa que es capaz de hacer que esto sea una tarea sencilla. (www.akewuele.com) de manera que podemos crear nuestro perfume único, irrepetible, y que además nos identifique con él.
Ésta puede ser la mejor manera de que la imagen que queremos dar perdure en el tiempo, y que nuestros clientes, y nuestras visitas nos recuerden, según dicen para siempre.
Además el proceso de creación de un perfume puede ser algo estimulante original y muy divertido,,, toda una cuestión de nariz.
Cerrad los ojos y pensad en aquellos aromas que os evoquen momentos agradables, a qué queremos que huela nuestra casa, nuestra empresa,,, cuando abrimos la puerta, aromas cítricos, hierba recien cortada, tierra mojada...
Ánimo y a por vuestro aroma.
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