Una sala rustica y muy bohemia. Constrastando texturas

Nunca es fácil poner en pie un lunes tras un fin de semana de lo mas ajetreado y de lo mas inspirador.

Tras un día de compras de nuevas incorporaciones al atrezzo familiar, y porque no...de dar un poco de vuelta a un futura reforma, la verdad es que a mi me ha costado mucho apagar hoy el despertador.

A todo esto además, he sumado el paseo por el campo, entre pinos, troncos y un silencio a tan solo unos kilómetros de la ciudad, encontrando un paraíso como si de una burbuja se tratara.

Con esta naturalidad...la verdad, es que me apetecía alargar el fin de semana un poco mas pero ni con esas, he podido conseguirlo.

Así que entre todo eso, he encontrado la sala de estar y comedor que os traigo hoy. Un lugar inspirador, delicado y rudo a la vez.

Un espacio donde se encuentran piezas que hablan solas tan solo por su personalidad, y donde se integran con la delicadeza de textiles, volumen y un aire bohemio.

Los colores fríos que la ayudan a y complementan no hacen mas que potenciar mas esa esencia nórdica y con un aire calmado que lo hacen perfecto para disfrutar.

Así, entre naturalidad y luz, es como vamos a empezar la semana, ¿Que os parece?

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By Carolina